WASHINGTON, DC – Gracias al cielo por Nikki Haley. La exgobernadora de Carolina del Sur y embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas ha resistido la presión para retirarsede la primaria presidencial republicana de 2024, una decisión que convertiría al expresidente Donald Trump en el candidato del partido.
Dado el daño que la agenda de Trump provocaría si ganara un segundo mandato en noviembre, Haley debería seguir dando pelea hasta la Convención Nacional Republicana en julio. Trump está considerando crear un “anillo” alrededor de la economía estadounidense imponiendo un arancel del 10% sobre todas la importaciones y rebajando el estatus comercial de China, lo que aumentaría sustancialmente los aranceles. Ha llegado inclusive a hablar de aplicar aranceles del 60% o más sobre los productos chinos.
Un arancel universal del 10% tendría el mismo efecto que los aranceles que Trump impuso cuando era presidente: costos más altos de los insumos y medidas de represalia, lo que resultó en menos oportunidades laborales para los trabajadores de la industria manufactura. Asimismo, aumentarían los precios de muchos productos de consumo. Los economistas de Capital Economics estiman que esta política comercial, sumada a un nuevo ataque económico contra China, le costaría a Estados Unidos un 1,5% del PIB.
WASHINGTON, DC – Gracias al cielo por Nikki Haley. La exgobernadora de Carolina del Sur y embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas ha resistido la presión para retirarsede la primaria presidencial republicana de 2024, una decisión que convertiría al expresidente Donald Trump en el candidato del partido.
Dado el daño que la agenda de Trump provocaría si ganara un segundo mandato en noviembre, Haley debería seguir dando pelea hasta la Convención Nacional Republicana en julio. Trump está considerando crear un “anillo” alrededor de la economía estadounidense imponiendo un arancel del 10% sobre todas la importaciones y rebajando el estatus comercial de China, lo que aumentaría sustancialmente los aranceles. Ha llegado inclusive a hablar de aplicar aranceles del 60% o más sobre los productos chinos.
Un arancel universal del 10% tendría el mismo efecto que los aranceles que Trump impuso cuando era presidente: costos más altos de los insumos y medidas de represalia, lo que resultó en menos oportunidades laborales para los trabajadores de la industria manufactura. Asimismo, aumentarían los precios de muchos productos de consumo. Los economistas de Capital Economics estiman que esta política comercial, sumada a un nuevo ataque económico contra China, le costaría a Estados Unidos un 1,5% del PIB.