Washington, DC – Al contrario de lo que ocurrió en 2022 —un año desastroso para los mercados de activos digitales— en 2023 hubo avances positivos y regulación agresiva en los mercados de activos digitales. El reciente acuerdo entre los reguladores estadounidenses y Binance, la mayor plataforma de intercambio de criptomonedas del mundo, mejorará la confianza, transparencia y responsabilidad del sector; mientras tanto, la mayoría de los centros financieros del mundo han incorporado normas claras para las cripto.
A pesar de esos avances, Estados Unidos corre el riesgo de quedar al margen si no establece nuevas reglas en 2024. Los responsables políticos tienen tres opciones para gestionar los riesgos y oportunidades del mercado cripto: regulación, legislación y denominación.
Hace dos años, el presidente estadounidense Joe Biden logró un enorme avance hacia la claridad regulatoria cuando emitió el Decreto del Poder Ejecutivo para Garantizar el Desarrollo Responsable de los Activos Digitales. Desde entonces, sin embargo, los intentos legislativos quedaron en punto muerto y EE. UU. se rezagó respecto de otros países en la regulación del sector, a pesar de que los precios de prácticamente todos los activos digitales se fijan en dólares.
Washington, DC – Al contrario de lo que ocurrió en 2022 —un año desastroso para los mercados de activos digitales— en 2023 hubo avances positivos y regulación agresiva en los mercados de activos digitales. El reciente acuerdo entre los reguladores estadounidenses y Binance, la mayor plataforma de intercambio de criptomonedas del mundo, mejorará la confianza, transparencia y responsabilidad del sector; mientras tanto, la mayoría de los centros financieros del mundo han incorporado normas claras para las cripto.
A pesar de esos avances, Estados Unidos corre el riesgo de quedar al margen si no establece nuevas reglas en 2024. Los responsables políticos tienen tres opciones para gestionar los riesgos y oportunidades del mercado cripto: regulación, legislación y denominación.
Hace dos años, el presidente estadounidense Joe Biden logró un enorme avance hacia la claridad regulatoria cuando emitió el Decreto del Poder Ejecutivo para Garantizar el Desarrollo Responsable de los Activos Digitales. Desde entonces, sin embargo, los intentos legislativos quedaron en punto muerto y EE. UU. se rezagó respecto de otros países en la regulación del sector, a pesar de que los precios de prácticamente todos los activos digitales se fijan en dólares.